Turismo verde en Limburgo: La naturaleza desconocida de Flandes

Cuando piensas en Flandes, seguro que vienen a tu mente sus famosas ciudades llenas de arte e historia. Pero hay regiones como Limburgo, que son el paraíso del ciclismo y además esconden una naturaleza sorprendente. Allí descubrirás Haspengouw, la «Toscana belga», con sus extensos campos de frutales, colinas onduladas y pueblos pintorescos que parecen sacados de una postal. Un lugar ideal si buscas tranquilidad, rutas verdes y paisajes de ensueño que muy pocos viajeros conocen. Acompáñanos a descubrir la naturaleza en Limburgo y todos los tesoros que te ofrece Haspengouw.

Más allá del arte urbano y las rutas típicas de ciudades flamencas, hay un Flandes donde el arte es parte de la naturaleza. Limburgo es la más oriental de las cinco provincias de Flandes, ya en el límite con los Países Bajos. Allí podrás disfrutar de la belleza natural de Haspengouw, donde podrás recorrer en bici o a pie los campos de frutales característicos de su paisaje. Dos mil kilómetros de rutas de ciclismo y senderismo te esperan. Pero ojo no te confundas porque ¿Sabías que existen hasta tres Limburgos? 😱

Tres lugares llamados Limburgo

Y si me apuras hasta 4, porque también hay una Abadía de Limburgo en Alemania 😂. Por suerte no llega a los más de 1.700 San José que hay en el mundo, pero sí, tanto Limburgo puede ser un lío. El primero fue un ducado que surgió en el s. XI alrededor de la ciudad de Limburgo, en la actual Valonia. Siglos después, cuando la mayoría del territorio de este ducado ya pertenecía a la región de Lieja, el rey Guillermo I de los Países Bajos creó una nueva provincia con ese nombre. ¿El motivo? Que era también duque de Limburgo, y no podía consentir ser un duque sin ducado 😜.

El tercer Limburgo, y el que realmente nos interesa, nació tras la independencia de Bélgica en 1839. Con el Tratado de Separación, el territorio de Limburgo se dividió en dos: uno en Países Bajos y otro en Bélgica. Este último, nuestro Limburgo flamenco, es hoy conocido como la capital del ciclismo y del turismo verde en Flandes.

Imprescindibles del turismo de Naturaleza en Limburgo

Limburgo es una región llena de contrastes, dividida en cuatro áreas geográficas únicas que la convierten en un destino ideal para los amantes de la naturaleza. Al sur, Haspengouw te enamorará con sus colinas onduladas y campos de frutales. En el este, Maasland se extiende a lo largo del río Mosa, ofreciendo paisajes fluviales de ensueño. Al norte y centro, Kempen combina bosques con poblaciones encantadoras. Por último Voer, separada físicamente del resto de Flandes, es un rincón donde reinan la tranquilidad y la belleza natural.

El corazón vibrante de Limburgo es Hasselt, su capital y un punto de partida perfecto para explorar esta hermosa región flamenca. Pero adentrémonos en Haspengouw, el «jardín de Limburgo», dónde naturaleza, historia y turismo verde se entrelazan en perfecta armonía.

Borgloon: Naturaleza, historia y arte en Haspengouw

Borgloon es un destino imprescindible para quienes buscan combinar paisajes de ensueño, historia y arte al aire libre. Esta pequeña ciudad invita a explorar su rica tradición frutícola, sus innovadoras instalaciones artísticas y su conexión con la naturaleza.

Descubre el pasado y el presente en la antigua fábrica de sirope

Tu aventura en Borgloon puede comenzar en la histórica fábrica de sirope, un icónico edificio restaurado que ahora alberga la Oficina de Turismo. Este espacio no solo te sumergirá en la historia de la producción de sirope de manzana y pera, sino que también es el lugar perfecto para adquirir productos locales, alquilar bicicletas e informarte sobre rutas y actividades. ¿Sabías que los habitantes de Borgloon se ganaron el apodo de «Strooplekkers» (lamedores de sirope) 😂?

Rutas entre frutales y arte al aire libre

Con tu bici alquilada, pedalea entre los vastos huertos de manzanos y perales que caracterizan el paisaje de Haspengouw. En primavera, los árboles en flor transforman el área en un auténtico mar de pétalos. Durante el resto del año el entorno es igualmente cautivador, con tonos verdes vibrantes en verano y cálidos dorados en otoño. Todas las rutas están bien señalizadas y pueden ser realizadas por ciclistas de todos los niveles.

Además del paisaje natural, Haspengouw también es un museo al aire libre gracias al proyecto PIT, que fusiona arte y naturaleza. Una parada obligada es Memento, una instalación de Wesley Meuris en el cementerio de Borgloon. Esta obra combina estructuras minimalistas con su entorno para evocar reflexiones sobre la memoria y la conexión entre lo finito y lo infinito. No deja de ser curioso que en este cementerio, las cenizas son esparcidas en sus campos de frutales. Igualmente impresionante es Reading Between the Lines, de Gijs Van Vaerenbergh, una iglesia «transparente» de acero «corten» que parece desvanecerse en el paisaje según el ángulo de visión, fusionando arquitectura y naturaleza en perfecta armonía. Además, esta obra de arte intenta ser un homenaje a los templos rurales, tan importantes para las comunidades agrícolas de la región.

Historia viva en Groot-Loon y Manshoven

Si prefieres caminar, la ruta que cruza Manshoven te llevará por adoquines históricos y una cruz beguina del s. XVII. Uno de los lugares más interesantes que puedes visitar es la Capilla de Helshoven, un lugar de peregrinación desde el s. XIII reconstruido por la Orden Teutónica. También puedes explorar la iglesia de Sint-Servatiuskerk en Groot-Loon, más o menos de la misma época. Alberga la instalación Proximity effect del proyecto PIT, pero esta dejó de funcionar. Curiosamente, un español que estaba haciendo el Camino de Santiago se ofreció a repararla y así lo hizo, pero esta volvió a estropearse poco después. ¿Y cual era el nombre del buen samaritano? Y por eso, los lugareños bromean diciendo que Sint-Servatiuskerk es «la iglesia que Jesús reparó» 😂.

Alden Biesen: Historia y majestuosidad en Bilzen

Está claro que la naturaleza en Limburgo es maravillosa, pero para nosotros «no hay viaje sin castillo» 😜.  El Castillo de Alden Biesen es un testimonio del poder y la historia de la Orden Teutónica en Flandes. Este imponente conjunto arquitectónico, que combina elementos medievales y barrocos, fue fundado en el s. XIII para servir de sede a la Gran Comandancia de la Orden Teutónica en la región. En el siglo siguiente se crearía la comandancia de Nieuwen Biesen en Maastricht, y aunque teóricamente estaba subordinada a Alden Biesen, en la práctica pasó a convertirse en la residencia del Gran Comandante.

Acceso principal a Alden Biesen construido en el s. XVII. Está ubicado a 30 metros de la fortaleza, en el camino a Maastricht.

Hasta el s. XVI la Orden no regresó a Alden Biesen, reformando y renovando el castillo que recuperó sus días de gloria. Durante los siglos posteriores, los sucesivos Grandes Comandantes irían añadiendo diversos elementos a Alden Biesen según los gustos de la época.

Un sorteo amañado

En el s. XVIII la región cayó en manos francesas y Alden Biesen fue confiscado y subastado. El alcalde de Hasselt adquirió el castillo, pero no podía pagar los cuantiosos impuestos de la propiedad. Por ello se le ocurrió sortearlo aunque obviamente hizo trampa para seguir conservando el castillo 😱.

Visita al castillo y sus jardines

Aunque sufrió un terrible incendio a mediados del s. XX, hoy día Alden Biesen se alza majestoso y completamente restaurado. Actualmente es el centro cultural europeo de la Comunidad Flamenca y es un lugar vivo donde se celebran numerosos eventos, como el Festival Internacional de Narración, exposiciones de arte y todo tipo de encuentros y eventos. Además, durante todo el año, sus puertas están abiertas para quienes deseen empaparse de cultura, historia y belleza natural.

A pesar de las sucesivas reformas y restauraciones, las estancias del Gran Comandante conservan su foso medieval

Uno de los principales puntos de interés de Alden Biesen son sus majestuosos jardines, que incluyen un jardín inglés y un jardín francés, perfectos para pasear entre setos cuidadosamente recortados y flores de temporada. Además, en el interior del castillo puedes ver la Iglesia de la Natividad de Nuestra Señora, construida en el s. XVII por la Orden Teutónica. Este templo destaca por su sobria belleza y por albergar las lápidas de algunos de los Grandes Comandantes de la orden, así como obras del pintor flamenco Gaspar de Crayer, seguidor de Rubens.

Wijnkasteel Genoels-Elderen: La Toscana en el corazón de Flandes

¿Sabías que Flandes también tiene su propia región vinícola? Además, en Riemst se encuentra el Wine Castle Genoels-Elderen, con la finca vinícola más grande de todo el país. Aunque el edificio actual neoclásico fue construido en el s. XIX, el edificio original y las bodegas datan del s. XIII. Sin embargo, la producción de vino quedó interrumpida hasta que hace tres décadas fue el precursor del renacimiento de la vitivinicultura en Bélgica.

En las visitas guiadas no sólo aprenderás sobre el proceso de elaboración del vino, también disfrutarás de los hermosos jardines del castillo y podrás ver la antigua bodega. Además, recorrerás sus extensos viñedos dónde destacan las variedades Chardonnay y Pinot Noir con las que elaboran sus vinos blancos y espumosos. Por supuesto, al final de la visita podrás disfrutar de una cata en la que descubrirás por qué sus vinos son reconocidos más allá de las fronteras de Flandes.

Tip viajero: Hay visitas guiadas a ciertas horas, pero sólo en neerlandés. De miércoles a sábado entre las 10 y las 16 puedes reservar una visita privada de 2 horas en inglés con cata. ¡No te arrepentirás!

Otras opciones de turismo verde en Limburgo

El turismo de naturaleza en Limburgo es mucho más que Haspengouw. En Kempen puedes ir en bicicleta entre las copas de los árboles, o atravesar el agua como si fueses Moisés cruzando el Mar Rojo 😱. En Maasland tienes uno de los puertos deportivos de interior mejor equipados de toda Europa occidental. Por último, en Voer podrás disfrutar de «De Bronnenwandeling», una de las rutas senderistas más hermosas de todo Flandes. Y por supuesto, también tienes cultura, cómo los numerosos museos de Hasselt, el antiguo centro minero de Genk o Tongeren, la ciudad más antigua de Flandes. Y esto es sólo una muestra de todo lo que Limburgo tiene preparado para ti.

Dónde comer en Limburgo

Quizás pienses que la comida típica de Flandes son las patatas fritas y los mejillones y su bebida típica la cerveza. Olvídate de todo eso porque ahora estás en Limburgo, zona ganadera, de frutales y cómo ya sabes, incluso de viñedos.

De Bron, auténtico sabor regional

Ubicado en una pedanía de Borgloon, la cafetería-restaurante De Bron combina un ambiente renovado y acogedor con lo mejor de la cocina regional. No dudes en probar cualquiera de sus carnes, que son espectaculares, aunque también puedes disfrutar de clásicos como los mejillones 😜. Perfecto para familias, cuenta con muchas opciones para niños, aunque algunas cómo las hamburguesas caseras también harán el gusto de muchos adultos. Además, cuenta con una amplia selección de vinos internacionales, entre los que hay franceses, italianos ¡incluso españoles 😱!

¿Ávila? No… esto es Flandes 😜

Consejo: Reserva con antelación, especialmente los fines de semana, ya que es muy popular entre la gente local.

Jorishoeve, sabor local entre frutales en Gingelom

Con raíces en el s. XIX, en esta granja no sólo se cultivan frutas, también experiencias únicas. Puedes disfrutar de la cocina local en su encantador bistró, ubicado en los antiguos establos de caballos, o relajarte en su patio. Pero la joya de la corona es su famoso picnic entre frutales: imagina degustar productos frescos rodeado del verde de la naturaleza 🌳🍎.

Consejo: Antes de reservar el picnic, revisa la previsión del tiempo. Si la lluvia se cruza en tus planes 🌧️, el equipo de Jorishoeve siempre tiene alternativas como su pintoresco invernadero acristalado, dónde podrás disfrutar igualmente de su deliciosa oferta

Restaurante Akko, alta cocina en Bilzen

Adentrarte en Akko es embarcarte en un viaje culinario único. De la mano del chef Sébastien Oger, disfrutarás de platos elaborados con productos de temporada cuidadosamente seleccionados y presentados con maestría. Pero la experiencia no termina en el paladar: el restaurante está situado en un entorno histórico incomparable, rodeado por los jardines de la Gran Comandancia de Alden Biesen, que añaden un toque de magia a cada comida.

Además, la atención al detalle, tanto en el servicio como en los tiempos entre platos, convierte Akko en el lugar perfecto para un comida inolvidable. ¿El menú? Puedes elegir entre 3 y 7 platos, aunque para una cena, 4 o 5 suelen ser ideales.

Consejo: Reserva con antelación y avisa de posibles alergias o restricciones alimentarias ya que el menú es cerrado. ¡Déjate sorprender por esta joya en Bilzen! Es, sin duda, una de las mejores experiencias culinarias que he vivido viajando por Europa.

Eetcafé ‘t Gasthuis, un bocado de historia en Bilzen

Ubicado en un edificio del s. XVII anexo a la fortaleza de Alden Biesen, esta acogedora cafetería es perfecta para quienes buscan una experiencia más modesta pero igualmente memorable. Con una historia que abarca desde su uso como escuela para jóvenes locales hasta su transformación en posada para artesanos y viajeros en el s. XVIII, ‘t Gasthuis conserva el encanto de su pasado en cada rincón.

Hoy, este lugar histórico te invita a disfrutar de la gastronomía regional en un entorno único. Desde croquetas artesanales y sopas del día hasta parrilladas de carnes locales y platos de temporada, el menú ofrece opciones tanto para un refrigerio ligero como para una comida más relajada y completa. Además, no olvides reservar espacio para los postres, como su irresistible mousse de chocolate o el tartar de frutas frescas con sorbete 😜.

Consejo: Si el clima acompaña, su terraza al aire libre es simplemente irresistible.

Dónde dormir para hacer turismo de naturaleza en Limburgo

En la región encontrarás todo tipo de alojamientos para todos los bolsillos, pero te recomendamos dos particularmente interesantes. Eso sí, ¿A qué equipo perteneces? ¿Naturaleza y aventura o lujo con historia? Si haces turismo verde en Limburgo, puedes tener ambas experiencias.

Tranendreef: Dormir en una gota suspendida en el bosque de Borgloon

¿Te imaginas pasar la noche dentro de una gota de agua? Bueno, en realidad, estando en la región de los frutales, quizás estas «gotas» parezcan más peras colgando de los árboles 😜. En el bosque de Borgloon, en Limburgo, Tranendreef te invita a vivir una experiencia única que combina arte, sostenibilidad y naturaleza.

Diseñadas por el artista holandés Dre Wapenaar como parte del proyecto cultural PIT, estas tiendas en forma de gota reinterpretan nuestra conexión con el entorno. Cada “pera” (o gota, según lo veas) tiene espacio para dos adultos y dos niños, con un interior sencillo pero acogedor que incluye ventanas para disfrutar de las vistas verdes del bosque.

El área cuenta con servicios básicos como baños y una zona de barbacoa, todo diseñado con criterios ecológicos. Y si buscas hacer algo más que descansar entre los árboles, este rincón de Limburgo tiene mucho que ofrecer: desde rutas de senderismo hasta el histórico castillo de Hex.

Tip viajero: ¡Reserva pronto! Con solo unas pocas «gotas» disponibles y una demanda altísima, este alojamiento se agota rápido en temporada alta. Para hacerlo, puedes seguir el enlace del título.

Martin’s Rentmeesterij: Elegancia y comodidad junto al castillo de Alden Biesen

Si Tranendreef es para quienes buscan aventura en plena naturaleza, Martin’s Rentmeesterij es el refugio perfecto para los que prefieren el lujo y la comodidad sin perder de vista la historia y el encanto local. Este elegante hotel de cuatro estrellas se encuentra literalmente a un paso del majestuoso castillo de Alden Biesen. Por eso, Martin’s Rentmeesterij es un lugar ideal para disfrutar de la belleza de la región de Limburgo con todas las comodidades modernas.

A pesar de ser un edificio nuevo, ocupa el espacio dónde en su día se alzaba la residencia del administrador del castillo (de ahí su nombre, «Rentmeesterij»). Por eso, el hotel combina a la perfección el encanto del pasado con un diseño contemporáneo. Las habitaciones están decoradas con gusto y atención al detalle, ofreciendo una experiencia cálida y acogedora. Además, el hotel cuenta con un spa, una piscina interior y el refinado restaurante Akko del que ya te he hablado.

Tip viajero: Después de un día explorando el castillo y sus alrededores, regálate un momento de relax en el spa del hotel. ¡Es el contraste perfecto con la aventura en la naturaleza que ofrece Tranendreef! Puedes reservar tu estancia en el enlace del título.

Ahora que conoces las joyas verdes y los paisajes naturales únicos de Limburgo, solo queda una cosa por hacer: ¡coge tu mochila, súbete a la bici y ven a disfrutar del turismo verde en Flandes! Limburgo te espera con los brazos abiertos. 🌿🚴‍♀️ ¡Hasta pronto!

Este artículo es parte de una colaboración con Visit Flandes que nos llevó a conocer la naturaleza de la región. Agradezco a las oficinas de turismo locales y especialmente a los guías, el recibimiento y atención que nos permitieron descubrir esta parte tan hermosa y desconocida de Flandes.

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