Qué ver en Ágreda, la Villa de las Tres Culturas

Estratégicamente ubicada entre el Valle del Ebro y la meseta castellana, Ágreda se destaca cómo la localidad más monumental de la Comarca del Moncayo. Conocida como la Villa de las Tres Culturas, sus calles, plazas, casas, templos y conventos, conservan el legado de cristianos, judíos y musulmanes. Además, Ágreda es la cuna de la «Dama Azul de los Llanos», la Venerable Sor María de Jesús de Ágreda. Fue consejera del rey y predicó en Nuevo México, pero ¡nunca abandonó su convento 😲! Acompáñanos a descubrir qué ver en Ágreda: su rico patrimonio y su herencia cultural te esperan ¿Te vienes?.

«Soria ni te la imaginas», una verdad como un templo. Un desconocido Patrimonio, una espectacular Naturaleza, una rica Cultura y una deliciosa Gastronomía te esperan para descubrirlas. Ágreda, situada a los pies del pico más alto de la Provincia, es un claro ejemplo de todo ello. Rodeada por un bello entorno natural, Ágreda se revela cómo una perla oculta en las faldas del Moncayo, cuya belleza nadie adivinaría mientras atraviesa la nacional 122 entre Soria y Zaragoza.

Pinceladas de la historia de Ágreda

La historia de esta región se encuentra firmemente enraizada en la antigüedad. Estuvo habitada por la tribu celta de los pelendones, como lo atestiguan los restos arqueológicos encontrados en La Muela. Algunos estudiosos identifican Ágreda con la importante ciudad celtíbera de Arekoratas, de la cual se cree que podría derivar el nombre actual de la villa. Sin embargo, otros investigadores sugieren que esta antigua ciudad más bien estaría situada en Muro de Ágreda.

No se sabe si en época romana aquí había una ciudad, o quizás un campamento. Posiblemente, se construyesen en la zona algunas villas dispersas, cómo las encontradas en La Sinagoga y en el Parque de la Dehesa. Menos información tenemos aún de la etapa visigoda, y no sería hasta la época árabe, que se construirían en la región varias atalayas para proteger estas tierras de frontera. Con el tiempo, se levantó una alcazaba, y en época califal se alzaba en Ágreda una auténtica medina con al menos dos mezquitas.

De una población de frontera a la Villa de las Tres Culturas

Ágreda fue conquistada por Alfonso I de Aragón, apodado el Batallador, en el s. XII, repoblando la villa con moriscos del Valle del Ebro. A su muerte, pasó a Alfonso VII de León, que favoreció el asentamiento de cristianos de la serranía soriana, concretamente de las poblaciones de Yanguas, Magaña, Sierra del Alba y San Pedro Manrique. Para garantizar su fidelidad, el monarca constituyó la Comunidad de Villa y Tierra de Ágreda, un territorio de hombres libres sometidos únicamente a la jurisdicción real.

A las comunidades morisca y cristiana pronto se unió la hebrea. Sin embargo, esta nunca vivió en una aljama o barrio separado, sino que se estableció junto con los cristianos. La villa se configuró en cuatro recintos amurallados. Por un lado, la antigua medina, por el otro, tres barrios independientes construidos en torno a las parroquias de San Miguel, Santa María de la Peña y San Juan. Por su posición fronteriza, Jaime I el Conquistador decidió celebrar en Ágreda su boda con Leonor de Castilla. Algunos monarcas posteriores trataron de transformar la villa en señorío sin éxito, mientras que otros ampliaron sus privilegios a condición de que reforzaran las murallas.

Durante siglos las tres culturas convivieron en la Villa de Ágreda. Cuando se pidió al Concejo que delimitase su aljama su respuesta fue «los judíos nunca vivirían separados del resto de la población» 😯. Es más, cuando la comunidad hebrea fue expulsada, la corona otorgó al Concejo la Sinagoga para que se instalasen en ella. Sin embargo, este siguió celebrando sus reuniones en el atrio de la iglesia de San Miguel 😂. A la expulsión de los judíos se unió la de los moriscos, cuyas casas debían entregarse a cristianos viejos. El barrio árabe pasó a llamarse Villanueva, pero muy pocos cristianos viejos se mudaron al mismo.

El Siglo de Oro

La expulsión de judíos y moriscos trajo un cierto declive a la villa. Sin embargo durante el s. XVII, dos importantes figuras, una noble y otra religiosa dejarían una huella imborrable en Ágreda.

La primera de ellas fue Don Diego González de Castejón y Vinuesa, regidor de Soria y Ágreda. El amor de su padre por Ágreda era tal que como última voluntad pidió a Don Diego que levantase «un palacio digno de albergar a reyes y nobles». Así lo hizo, y construyó el Palacio de los Castejón. Y por supuesto, en él durmió un monarca, concretamente Felipe IV. Pero, ¿Qué llevó al «Rey Planeta» a una pequeña villa soriana? 🤔. La respuesta la tiene la segunda de las grandes figuras del s. XVII en Ágreda, la llamada Dama Azul de los Llanos.

Escultura de Sor María de Jesús de Ágreda enfrente del Convento del que fue abadesa durante casi cuatro décadas

Sor María de Ágreda

Sin duda, Santa Teresa de Jesús es la escritora mística más importante del Renacimiento en España, pero posiblemente Sor María de Jesús sea la mística más influyente del Barroco español. Su obra más importante «Mística Ciudad de Dios» ha sido impresa en cientos de ediciones y traducida a todo tipo de idiomas, incluyendo el árabe, el japonés y el coreano. Es mas, en la película La pasión de Cristo, su director Mel Gibson se inspiró en la cruda descripción de ese hecho en «Mística Ciudad de Dios».

Sor María de Jesús era hija de hidalgos pobres, y sus padres eran tan devotos ¡que se divorciaron para hacerse religiosos 😯!. Ella ingresó con su madre y su hermana en el convento de franciscanas descalzas fundado en su casa natal. Posteriormente, Sor María de Ágreda fundó el Convento de La Inmaculada Concepción, del que fue nombrado abadesa y en el que terminaría sus días. Sor María de Ágreda fue consejera del rey Felipe IV, y aunque su relación era sobre todo por carta, el monarca la visitó en tres ocasiones. Es más, algunos autores creen que fue ella quien propició la caída en desgracia del Conde-duque de Olivares.

Cuerpo incorrupto de la Venerable María Jesús de Ágreda, La Dama Azul de Los Llanos

La Dama Azul de Los Llanos

Pero Sor María de Jesús es conocida sobre todo por poseer una habilidad que me encantaría tener, la de estar en dos lugares a la vez 😉. Allá por el año 1629 los franciscanos se adentraron en las planicies de Nuevo México y Texas. Se encontraron con indios jumanos que sorprendentemente ya conocían el Evangelio. Según decían, lo habían aprendido de una mujer joven ataviada con un hábito azul celeste, propio de las monjas Concepcionistas, y que conocía su idioma. Continuaron los franciscanos adentrándose en esos territorios inexplorados sólo para encontrar otras tribus a las que había evangelizado la llamada Dama Azul de Los Llanos.

Pero aquí no acaba la historia, porque poco después un millar de nativos llegaron al convento de San Antonio en la Misión de La Isleta en Nuevo México pidiendo ser bautizados. Según explicaron, así se lo había pedido una mujer vestida de azul llamada María, que había venido de un lugar llamado Ágreda 😯. Pero lo más asombroso de esta historia no es el hecho de que Sor María de Jesús nunca abandonó su villa natal. El cronista portugués fray Alonso de Benavides refiere que en sus conversaciones con Sor María de Jesús, la monja le dio todo lujo de detalles sobre los indios jumanos, sus tierras y sus costumbres. Es mas, en su convento en Ágreda se conservan bordados suyos con aves y plantas más propias de las tierras más allá del Atlántico.

Detalle del lienzo «Mística Ciudad de Dios» (1706) del pintor mexicano Cristóbal de Villalpando, Museo de Guadalupe, México

Sor María de Ágreda y Casanova

A mediados del s. XVIII, el aventurero y seductor Giacomo Casanova llagó a España intentando obtener un puesto en la administración de Carlos III. En esa época la fama de «Mística Ciudad de Dios» había alcanzado toda Europa, y por eso el descreído libertino pidió leerlo. Quizá no te lo creas, pero en sus memorias Casanova dijo que la lectura de esos textos le llevaron a un estado de delirio místico y temió perder la razón 😲.

Los siglos siguientes tuvieron sus altibajos, pero también trajeron grandes transformaciones y la expansión de la villa más allá de sus murallas. A pesar de la mecanización del campo, la industrialización se impuso al sector primario. Ágreda te espera a los pies del Moncayo, orgullosa de su pasado y de su increíble patrimonio. ¿Quieres conocerlo? 🤔

Además, tiene sorprendentes espacios naturales, como el Parque de la Dehesa

Qué ver en Ágreda

Aunque de sus murallas sólo quedan restos, si se conservan algunas puertas y torreones de las mismas. Además, también hay varios edificios, templos y museos de gran interés. Por eso, es sorprendente que, con todo lo que se puede hacer y lo que hay que ver en Ágreda, muchos visitantes dediquen menos de un día a conocer la Villa de las Tres Culturas 😭. Te dejamos este mapa para que puedas ubicarte mejor y una propuesta de paseo por la localidad. Si lo prefieres, puedes reservar una visita guiada en el teléfono 976 192 714 o en el correo electrónico turismo@agreda.es. No sólo es muy recomendable, también hay muchos atractivos que sólo podrás visitar con un guía.

Plaza Mayor y Ayuntamiento

Antiguamente, los vecinos de cada barrio de Ágreda se reunían alrededor de las parroquias principales de los mismos. Para construir un lugar de encuentro común, en el s. XVI se cubrió el cauce del río Queiles, que separaba San Juan de Santa María de la Peña. Allí se construyó el Ayuntamiento, en estilo renacentista, con soportales en un extremo de la planta baja y arcadas jónica en el frontal del primer piso. En la planta baja se encuentra la Oficina de Turismo de Ágreda.

La Plaza Mayor desemboca en la Plaza de la Virgen, dónde se alza el templo dedicado a la patrona de Ágreda, Nuestra Señora de los Milagros. Justo al lado hay una gran plaza, un recuerdo del claustro del desaparecido Convento de San Agustín, hoy reconvertido en la Plaza del Patronazgo. Recibe este nombre porque en ella se encuentran todas las advocaciones de la Patrona veneradas en las 17 poblaciones del Patronazgo de Ágreda.

Basílica de la Virgen de los Milagros

Se trata de un templo de grandes proporciones, casi catedralicio. Fue construido en el s. XVI en estilo renacentista herreriano como parte del antiguo Convento de San Agustín. Su forma es de cruz latina, con un exterior austero. El interior presenta una nave única y un retablo mayor de estilo barroco. En el centro del mismo está la talla tardorrománica del s. XIV de La Virgen de los Milagros.

La talla se conocía como La Virgen de Yanguas, pues fue hallada por un pastor de esa localidad. En un lateral de la basílica podemos leer el milagro que le dio su actual nombre. En 1527 durante la Procesión del Corpus la talla milagrosamente se movió, inclinándose hacia la puerta de la casa de un morisco. Esta se abrió y se descubrió que era un falso converso 😲, porque estaba trabajando en lugar de respetar un día tan sagrado. Después de ser descubierto, el morisco se convirtió al cristianismo, y La Virgen de Yanguas cambió su nombre para siempre.

No te pierdas tampoco la pila bautismal románica, decorada con dos niveles de arcos de medio punto. Como curiosidad, en la parroquia figura la partida de bautismo de un musulmán de Constantinopla que se encontraba preso en Pamplona. ¡En la cárcel se le apareció Sor María de Jesús de Ágreda y decidió convertirse al catolicismo!.

En la Plaza de la Virgen verás también los restos de la Puerta de Santo Domingo. Atraviésala y toma la calle Vicente y Tutor. Verás el antiguo ábside de la iglesia románica de Santo Domingo, del s. XII. Sin embargo, tradicionalmente se le ha llamado La Sinagoga. ¿Estaría realmente aquí la sinagoga de Ágreda?. Continua un poco más y llegarás a un singular palacio ubicado al lado del arco de Felipe II, que da acceso al barrio árabe.

Palacio de los Castejón y Jardín Renacentista

Construido en estilo herreriano, ocupa el barranco que separaba el barrio árabe del resto de Ágreda. Si para construir el Ayuntamiento se había cubierto el barranco de la Lobera, el regidor de Ágreda y Soria no iba a ser menos 😂. Las dos plantas bajas que salvan el desnivel se convirtieron en las mazmorras, mientras que las dos superiores albergarían las dependencias palaciegas. Dos majestuosas torres de planta cuadrada dominan el ala norte, aumentando la imponente imagen del palacio.

Pero si algo destaca en el Palacio de los Castejón es su maravilloso Jardín Renacentista, una rareza entre los palacios castellanoleoneses de la época y uno de los imprescindibles que ver en Ágreda. Paseando entre los parterres descubrirás un curioso teatro vegetal mientras te embriaga el aroma de plantas aromáticas y medicinales. Anexo hay un segundo jardín, de corte barroco, que incluye un reloj astronómico. Antes de visitarlo, admíralo desde la Enamoradera, la peculiar ventana que separa ambos jardines.

El Palacio de los Castejón abre los puentes, festivos y vacaciones de 11 a 14 y de 16 a 20. De junio a septiembre abre todos los días. Si quieres subir a los torreones o bajar a las mazmorras deberás consultar con la Oficina de Turismo. El acceso al Palacio de los Castejón es gratuito, así que no tienes excusa para no visitar uno de los imprescindibles que ver en Ágreda.

El Barrio árabe de Ágreda

Atraviesa ahora el arco de Felipe II para adentrarte en la antigua medina. La puerta data del s. XVI y en ella puedes ver el escudo de los Austrias. Continua por la Calle Tanerías hasta llegar a los restos mejor conservador de la antigua muralla árabe. Pero antes de seguir avanzando, baja por la calle a tu derecha para ver una fuente árabe que en su día fue parte del sistema de regadío de esta cultura.

Arco Califal, Puerta del Agua y Torreón de la Muela

Vuelve ahora al lienzo de muralla y admira uno de los símbolos más reconocibles de Ágreda, el arco de herradura del s. X. Este arco de época califal es conocido cómo Puerta del Cementerio, pues justo enfrente se encuentra la colina dónde hacían sus enterramientos los árabes.

Continúa por la Calle Ermita hasta llegar a la conocida como Ermita del Barrio o de Nuestra Señora de los Desamparados. Ocupa el lugar exacto dónde estaba la casa del falso converso ante la que se detuvo la Virgen de los Milagros. Justo al lado de la ermita está el arco de herradura del s. VIII o IX que daba acceso a la alcazaba. Es conocida cómo Puerta del Agua, pues a su lado hay un aljibe.

Dentro del recinto de la alcazaba se alza el Torreón de la Muela, dominando el barranco del mismo nombre. Construido en la primera mitad del s. IX, este torreón bereber era parte del Castillo de la Muela, hoy desaparecido. Pregunta en el Turismo si lo pueden abrir y subir a su azotea. Te aseguro que las vistas son espectaculares 😉.

Centro de Interpretación de la ciudad y el territorio

Camina por la calle del Arco Árabe hasta la Calle de las Mezquitas. Hoy día no se conserva ninguna, pero supuestamente había varias en Ágreda. Aquí de encuentra un interesante Centro de Interpretación, que ya habrá llamado tu atención mientras admirabas los restos de la muralla árabe, pues está situado sobre la misma.

Dentro se recorre la historia de la villa hasta la actualidad. Las maquetas que muestran los antiguos recintos amurallados son muy interesantes, pues permiten hacerse mejor una idea de cómo es el urbanismo de la villa. Sólo por eso, es uno de los imprescindibles que ver en Ágreda. Pero, sin duda, el elemento más interesante es la reproducción de una alfarería, con un horno original encontrado en las excavaciones del barrio árabe.

La visita al Centro de Interpretación es gratuito y abre todos los días de 10 a 18:30.

Regresa ahora hasta la Puerta de Felipe II por la Calle del Barrio Moro, observando algunos pequeños restos del lienzo de muralla árabe. Toma de nuevo la Calle Vicente y Tutor y gira por la callejuela a tu izquierda que te llevará a un interesante museo.

Museo de Arte Sacro «Nuestra Señora de la Peña»

Si hay algo imprescindible que ver en Ágreda es precisamente este museo. Para empezar, se encuentra en la iglesia de la Virgen de la Peña, la más antigua de la localidad. Construida en el s. XII, aquí contrajo matrimonio Jaime I el Conquistador con Leonor de Castilla. Además, se dice que en su día aquí se alzaba una mezquita. Su portada románica es muy interesante, pero lo más peculiar es su interior ¡porque tiene sólo dos naves con un púlpito en el centro! 😯

Hoy día es la sede del primer museo de arte religioso de Castilla y León, y alberga una interesante colección de retablos y esculturas que van del siglo XIII al XVIII. Aunque no alberga cientos de obras, todas son de un interés indudable, como el Cristo del Consuelo, el retablo barroco de Nuestra Señora de la Peña y dos partes bajas de retablo, o predelas, de estilo gótico y exquisita factura.

Para los horarios de apertura actualizados, lo mejor es contactar con la Oficina de Turismo de Ágreda 😉. Baja ahora por la Calle Sebastián Logroño atravesando la Puerta de los Pilares hasta llegar a la Plaza de San Miguel.

Iglesia de San Miguel

El templo actual fue construido en el s. XVI en estilo gótico, aunque conserva una torre románica almenada del s. XII. No suele estar abierta, pero si tienes oportunidad, no te pierdas su excepcional retablo mayor plateresco ni el sepulcro de alabastro policromado en la parte izquierda del presbiterio.

Continúa ahora por la Calle Concepcionistas hasta llegar a otro de los imprescindibles que ver en Ágreda, el convento construido por Sor María de Jesús de Ágreda cuando fue nombrada abadesa de las Concepcionistas.

Monasterio de la Inmaculada Concepción

El monasterio fue construido en el s. XVII, y en el todavía viven varias Concepcionistas de estricta clausura. La estatua de Sor María de Jesús se alza frente al mismo. La iglesia, de estilo barroco, se puede visitar de 10 a 18:30 siempre que no la estén utilizando las monjas. Lo más destacado de la misma es el cuerpo incorrupto de Sor María de Jesús 😲.

El Monasterio tiene un interesante Museo con cartas originales de Sor María al rey Felipe IV, obsequios del monarca, retratos de la escuela de Velazquez… Por desgracia actualmente no está abierto al público 😭, aunque puedes preguntar en informacion@mariadeagreda.org.

Pasada la entrada de la iglesia del monasterio hay una puerta con un escudo que da entrada a la tienda del convento. Por supuesto además de rosarios y otros artículos religiosos puedes adquirir «Mística Ciudad de Dios» y otros libros de Sor María. Como la congregación es de estricta clausura, toda compra se realiza a través del torno, que es original. Aunque no adquieras nada échale un vistazo y verás que tiene un gran clavo. Esto se hacía para evitar que se abandonasen bebés en el mismo.

Regresa ahora por la Calle Concepcionistas y tuerce a la izquierda por la Calle Agustinas para ver el lugar dónde la madre de Sor María fundó el Convento de la Purísima Concepción.

Casa Natal de Sor María de Jesús de Ágreda

Una placa señala la casa donde nació María Coronel y Arana, futura Sor María de Ágreda. Una vez divorciada de su padre, su madre fundó en esta misma casa el primer convento Concepcionista de Ágreda. Como ya se les había quedado pequeño, cuando fue nombrada abadesa, Sor María haría construir el actual Monasterio de la Inmaculada Concepción.

Un poco más adelante, en el lado opuesto de la calle se alza el Convento de las Agustinas, fundado en el s. XVII y actualmente abandonado. Sigue por esta calle y luego gira a la derecha por la Calle Ancha.

Torreón del Tirador y Puertas de Almazán y Santiago

El nombre no se debe a que en el medievo viviese aquí un certero arquero, sino porque en un costado se hizo un Juego de Pelota 😂. Se cree que esta torre albarrana fue construida en el s. XIV, aunque con el tiempo se fue aumentando su altura e incluso se le añadieron las almenas después del s. XVI. Adosadas a la misma hay dos puertas, la que daba acceso al recinto amurallado de San Miguel, denominada Puerta de Almazán, y la que permitía acceder al de Nuestra Señora de la Peña, llamada Puerta de Santiago.

Si sigues un poco hasta el número 14 de la Calle Ancha verás el escudo más antiguo que se conoce de la Villa de Ágreda. Lo que no se conoce es su procedencia, ni cómo ha llegado ahí 😜. Vuelve sobre tus pasos y sube por la Calle Castejón hasta llegar a la Plaza del mismo nombre.

Plaza de los Castejón

En su día en todo este espacio se alzaban palacios pertenecientes a esta poderosa familia. Todavía hay en pie dos grandes casonas del s. XVI. De un palacete del s. XV sólo queda un bello arco conopial. Sobre el mismo se encuentra el escudo de la familia y una ventana gótica.

También puedes ver los restos de la Iglesia de Nuestra Señora de Yanguas. Antes de albergar la talla de la patrona de Ágreda, este templo gótico estaba dedicado a San Martín. Baja ahora por la cuesta Antonio Sonier y una vez pases la trasera del Ayuntamiento gira a la izquierda por la Calle Arco hasta llegar a la plaza dónde comienza un singular paseo.

Paseo de Invierno

Con este singular nombre se conoce el paseo que discurre junto al río Queiles. Un túnel abovedado cubre el río en su camino hasta pasar por debajo de la Plaza Mayor. Sin embargo, tu anda a contracorriente. Un poco más adelante hay una bóveda sobre la que se encuentra el Jardín Barroco de los Marqueses de Paredes. En su día, fue visitado por figuras de la talla de Miguel de Unamuno o Antonio Machado, pero es privado y no se puede ver 😭. Por cierto, fíjate en las piedras del arco antes de entrar. Están numeradas, pero no todas están colocadas en el orden que les corresponde 😂.

El Paseo de Invierno va a dar al Parque de la Dehesa, otro de los lugares imprescindibles que ver en Ágreda.

Parque de la Dehesa

Antiguamente, este lugar fue una zona húmeda y pantanosa. En el s. XII, la Orden del Hospital de San Juan de Jerusalén lo convirtió en tierras cultivables y áreas para la cría de ganado. En el s. XIV «la Dehesa» pasó a manos de la Villa de Ágreda. Aunque en ella pastaba el ganado, con el tiempo la zona más cercana a la Villa se transformó en zona de recreo, creándose paseos en el s. XVIII.

Actualmente es un gran parque municipal, en el que destaca la mayor alineación de Castaños de Indias de Europa 😲. Camina bajo su sombra y llegarás a un área dónde se encuentra una fuente de agua sulfurosa de origen árabe. El olor no es muy bueno 😂, pero sus propiedades medicinales están más que probadas.

En la parte más alta del parque verás una zona tranquila llena de juncos. Son las lagunas de las que mana el río Queiles. También se encuentra aquí una zona recreativa y el área de autocaravanas de Ágreda.

Regresa ahora sobre tus pasos y camina hacia la Calle de las Murallas hasta llegar a otra de las puertas que se conservan de los recintos amurallados de la Villa.

Puerta de Añavieja y Torreón de la Costoya

Sobre la puerta actualmente hay una vivienda. Se llamaba Puerta de Añavieja porque de ella salía el camino hacia esa localidad. Un poco más adelante se encuentra el Torreón de la Costoya o del Rollo, que protegía el barrio de San Juan. Su nombre se debe a que cerca se encontraba el rollo, símbolo de la autoridad del Concejo de Ágreda.

Vuelve sobre tus pasos hacia la Puerta de Añavieja y atraviésala para bajar a la Iglesia de San Juán.

Iglesia de San Juán

En su día fue una de las tres parroquias medievales originales y conserva su portada románica. En ella se guardan los pasos procesionales del Viernes Santo, pero no suele estar abierta. Aun así, merece la pena acercarse a ella, porque conserva a sus pies una necrópolis rupestre que se utilizó entre los siglos IX y XIV. La mayoría de tumbas son antropomorfas, aunque existe una rectangular. Desde San Juan baja por la Calle Víctor Núñez hasta llegar a Nuestra Señora de Magaña.

Iglesia de Nuestra Señora de Magaña

Fundada en el s. XII, el templo actual es gótico, del s. XVI. Aquí fue bautizada Sor María de Jesús y actualmente está cerrada al culto.

Otras cosas que ver en Ágreda y los alrededores

En Ágreda hay un mirador cerca del Parque de la Dehesa que ofrece una interesante vista de la Villa. Se encuentra en el Cerro de la Coronación, anteriormente conocido con el funesto nombre de Cerro de la Horca. El cambio de nombre se debe a la Virgen de los Milagros, o mejor dicho al monumento en bronce de más de 10 metros de alto con la imagen de la patrona de Ágreda 😜. El monumento fue costeado por los vecinos de la localidad, y su construcción supuso el fin del antiguo nombre de este lugar.

Miradores

A menos de 10 minutos andando desde la Iglesia de Nuestra Señora de Magaña se encuentra el Mirador de los Molinos, justo al final de la calle del mismo nombre. Desde aquí tienes una magnífica vista tanto de La Muela cómo de la Basílica de la Virgen de los Milagros. Uno de los miradores más espectaculares de Ágreda es el de la Carretera de Vozmediano. Se encuentra a un kilómetro del Monasterio de la Inmaculada Concepción y puedes ir dando un paseo o en coche antes de adentrarte en el Moncayo soriano.

Rutas senderistas

Ágreda es punto de partida del sendero de largo recorrido GR86, conocido cómo Sendero Ibérico Soriano. También es el punto de partida de la ruta del Cañón del Val que termina en la Cascada del Pozo de las Truchas. Ida y vuelta desde Ágreda son 15 kilómetros, aunque tienes la posibilidad de hacer un recorrido mucho más corto, de unos 5 kilómetros. Para ello, toma la N-122 y antes de meterte en la rotonda que enlaza con la A-15 verás una carretera de acceso a fincas que sale a la derecha. Camina por esa carretera un poco y a la derecha hay una pista que es el inicio de la ruta circular que te llevará a la Cascada del Pozo de las Truchas.

El Moncayo de Soria

El macizo del Moncayo es la cota más alta de la Cordillera Ibérica. Esta maravilla natural es compartida por las provincias de Soria y Zaragoza. Curiosamente la zona «maña» es Parque Natural, pero no la parte soriana. Por suerte, parece que esta injusticia no durará mucho y pronto el Moncayo de Soria también gozará de esa distinción. Aun así, merece la pena dedicar tiempo a recorrer las distintas rutas senderistas del Moncayo soriano. Por eso, le hemos dedicado un artículo exclusivo que puedes leer en el enlace de esta sección 😉.

El Moncayo desde el mirador del Cerro de la Coronación

Gastronomía de Ágreda

La gastronomía de la Villa de las Tres Culturas es heredera directa de las mismas, aunque también se ve influida por su condición de localidad de frontera. Platos tradicionales son tanto la caldereta de conejo y costilla de cerdo cómo las migas de pastor. Además, abundan los platos preparados con bacalao, ya que desde hace más de seis décadas hay un secadero en Ágreda.

Un dulce típico de todos los Santos es el rollo, un bizcocho con forma de rosco cubierto por azúcar y anisillos. Otro dulce tradicional, que por suerte puedes degustar todo el año, son las huecas, unas rosquillas grandes pero muy ligeras. Reciben su nombre precisamente porque no tienen nada en su interior. Así, no te sentirás culpable por tomarte una entera… o varias 😜. En todas las panaderías de Ágreda podrás encontrar Langarto, un pan tierno en forma de media luna relleno de chorizo o sardina. Si tienes posibilidad prueba este último, porque su sabor es muy peculiar y está de rechupete 😋.

Por supuesto, no deja de ser Soria, así que ni se te ocurra pasar por Ágreda y no tomar un torrezno soriano 😋. Pero sin duda, el producto estrella de Ágreda es el cardo rojo.

El Cardo Rojo de Ágreda

Esta especialidad se siembra a finales de la primavera y se consume principalmente en las Navidades. Una peculiaridad única de Ágreda es que en noviembre, cuando la planta ha alcanzado su máximo desarrollo, la cubren casi totalmente con una pirámide de tierra. Así, se protege la planta de las heladas del Moncayo y adquiere su sabor y color únicos. De hecho, el cardo rojo de Ágreda es dulce, ¡y es habitual consumirlo en ensalada 😲!. Del 6 al 8 de diciembre se celebran las Jornadas del Cardo Rojo de Ágreda, sin duda uno de los mejores momentos para visitar la Villa de las Tres Culturas y descubrir este producto único.

Dónde comer en Ágreda

Hay varios lugares dónde reponer fuerzas mientras descubres todo lo que hay que ver en Ágreda. Si paseas por el Parque de la Dehesa para en El Bosque de Carymar. Tienen menú del día a buen precio y las cantidades son realmente espectaculares. Además, el servicio es muy rápido y atento. No te pierdas tampoco las instalaciones del restaurante «La nueva sinagoga». ¿A qué nunca habías comido en el ábside de una iglesia? 😜. Por último, te recomendamos… ¡una taberna de estilo irlandés! En Yumay Sport Tavern no sólo podrás tomarte una cerveza y tomar tostas, pizza o raciones, también tienes platos contundentes cómo chuleta e incluso puedes comer ¡una mariscada! 😲.

Si te dicen que en Ágreda vas a comer unas deliciosas zamburiñas, que no volandeiras, no te lo crees 😂

Dónde dormir en Ágreda

Con todo lo que hay que ver en Ágreda, lo ideal es hacer mínimo una noche en la Villa de las Tres Culturas. Tienes desde varias tipologías de apartamentos rurales para dos o más personas hasta un hostal a pie de la carretera N-122. Puedes buscar tu alojamiento en Ágreda en el siguiente enlace.

Sin duda, la Villa de las Tres Culturas es un lugar sorprendente en el que disfrutar de un maravilloso fin de semana de naturaleza, cultura y patrimonio Ahora que sabes todo lo que ver en Ágreda ¿a qué estás esperando? ¡Hasta pronto!

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