Ruta del Vino de Almansa, el secreto «en mitad del camino»
Entre la llanura manchega y la costa levantina, se encuentra un destino enoturístico donde los vinos poseen un carácter único, moldeado por siglos de historia y grandes hitos, como la Batalla de Almansa. Esta región fronteriza, rica en sabores y patrimonio, guarda secretos que esperan ser descubiertos. ¿Te animas a explorarlos? Acompáñanos en este viaje por la Ruta del Vino de Almansa y déjate sorprender por su historia, viñedos y cautivadores paisajes.
En el altiplano albaceteño, donde confluyen los sistemas montañosos Ibérico y Bético, se extiende un territorio que suele ser un lugar de paso para los viajeros que recorren la ruta entre Madrid y Alicante. Sin embargo, detenerse aquí es descubrir un mundo de historia, naturaleza y cultura. Este rincón ofrece una riqueza que va mucho más allá de su papel histórico. Su tradición vinícola, protagonizada por la Garnacha Tintorera, ha conquistado paladares en los cinco continentes, demostrando que estos vinos de altura son tan extraordinarios como el lugar del que proceden. Atrévete a explorar una tierra que merece ser mucho más que un punto intermedio en el camino.
Contenidos del post
- 1 Las Rutas del Vino de España
- 2 La Ruta del Vino de Almansa
- 3 Las localidades de la Ruta del Vino de Almansa
- 4 Dónde dormir en la Ruta del Vino de Almansa
- 5 Dónde comer en la Ruta del Vino de Almansa
- 6 Organiza tu viaje por la Ruta del Vino de Almansa
- 7 Descubre otras Rutas del Vino de España y Portugal
Las Rutas del Vino de España
España posee la mayor extensión de viñedo del mundo. Por eso, para situar el enoturismo en el lugar que se merece, surgió la certificación Rutas del Vino de España. Este sello de calidad tanto para establecimientos cómo para productos turísticos, garantiza una gran experiencia para los visitantes utilizando el vino cómo elemento conductor. Conocemos varias de la Rutas del Vino de España, pero a pesar de su reciente incorporación, la de Almansa merece sin duda un lugar destacado.
La Ruta del Vino de Almansa
Castilla la Mancha es el primer viñedo del mundo y «la bodega de Europa». Esta extensa comunidad acoge diez Denominaciones de Origen (DO) de Vinos y seis Rutas del Vino certificadas. La DO Almansa es una de las más pequeñas tanto en extensión como en producción, pero su Ruta del Vino demuestra que las mejores fragancias vienen en frascos pequeños.
Vino de Almansa para dummies
Una de las características de esta DO es la altura de sus viñas, que crecen entre los 700 y los 1100 metros. Precisamente, esta altitud proporciona a esta zona de producción un clima también a medio camino entre el levante y el clima manchego, con veranos cálidos y largos y fríos inviernos, pero más suaves que en el interior de la Mancha. Estas características permiten elaborar vinos frescos y equilibrados, obteniendo la máxima expresión de las características varietales de la uva. Pero además, la variedad estrella en esta zona es la Garnacha Tintorera, una de las pocas que tiene pulpa coloreada. Así, los vinos que la incluyen tienen un intenso color rojo picota y un intenso sabor, sobre todo si hablamos de monovarietales de la misma.
Bodegas de Almansa
La DO Almansa agrupa tanto bodegas de tradición familiar cómo cooperativas. La mayoría de ellas pertenecen a la Ruta del Vino, demostrando su compromiso con la calidad. Además, estas bodegas presentan una particularidad, y es que aunque no todas abren todos los días, los fines de semana siempre hay una «bodega de guardia». Así, da igual cuando recorras esta Ruta del Vino, porque incluso en temporada baja, siempre podrás visitar alguna de sus bodegas. Puedes consultar las bodegas de guardia en el siguiente enlace.
Dominio de Casalta
Después de 7 generaciones de viticultores, el 2010 el farmacéutico Pepe Rodríguez de Vera decidió lanzarse a la elaboración de vino. Su filosofía se basa en un respeto máximo a la materia prima y una mínima intervención. Y el 7 parece el número de la suerte de esta bodega, porque la Finca Casalta se extiende alrededor de un carrasco con más de 7 siglos de antigüedad y siete son las variedades de uva que se cultivan en la misma.
Visitar sus instalaciones y adentrarte en la «ermita» dónde se encuentran tanto la sala de catas cómo los depósitos y la sala de barricas es una auténtica maravilla. Puedes reservar tu visita guiada y cata en el teléfono 635 690 327.
Hacienda el Espino
En las mismas tierras que fueron regadas por los caídos en la Batalla de Almansa se alza esta bodega con sus viñedos ecológicos. Precisamente, su gama más premiada, incluso a nivel internacional, se llama 1707, rememorando el conflicto que cambió las tornas de la Guerra de Sucesión española.
Además, del vino, su propietario Guillermo Millán siente pasión por los caballos, y por eso las instalaciones incluyen un picadero. Puedes reservar tu visita guiada y cata en el teléfono 967 080 050.
Bodegas Matamangos
Hacienda Santa Rosa es una finca dominada por un palacete construido en el s. XVIII en estilo colonial. Se cuenta que el marqués de Colomer hizo las Américas y volvió de Cuba doblemente afortunado: con riqueza y casado. Para compensar a su esposa Rosa por aguantar los fríos inviernos de Almansa, construyó para ella el palacete. Ella por su parte, añorando su tierra, trató de plantar mangos en la finca, aunque por el nombre de la bodega esta claro que tuvo poco éxito 😜.
La mayoría de viñas de la finca son viñas viejas de pie franco, imprimiéndole un carácter muy peculiar a sus vinos. Puedes reservar tu visita guiada y cata en el teléfono 610 244 665.
Bodega Santa Cruz de Alpera
Esta cooperativa fue fundada en 1947 por 25 viticultores del municipio de Alpera y hoy día vende sus vinos en más de 50 países de todo el mundo. A pesar de sus modernas instalaciones y curiosidades cómo la elaboración de un vino… ¡azul!, muestran un respeto máximo por la tradición.
¿Una característica de sus vinos además de su calidad? Sus nombres, pues Cueva del Chamán y Rupestre, rinden homenaje al Patrimonio de la Humanidad que oculta la localidad. Puedes reservar tu visita guiada y cata en el teléfono 967 330 108.
Tintoralba
El germen de Tintoralba fue la Cooperativa del Campo Santa Quiteria, creada en 1957 por 65 agricultores de La Higueruela. Actualmente es una comunidad con más de 200 socios y sus vinos 🍷 dan gran protagonismo a la variedad local de Garnacha Tintorera 🍇, con la que elaboran uno de los pocos monovarietales de España.
Puedes reservar tu visita guiada y cata en el teléfono 967 287 012. Además, con un poco de suerte te atenderá Belén, alias Srta. Wines. No sólo es la Gerente del Área de Exportación, también una gran apasionada del mundo del vino.
Vinoteca de Sinforiano
En nuestro recorrido por la Ruta del Vino de Almansa no visitamos Bodegas Cano, pero si sus antiguas instalaciones, recientemente reconvertidas en una singular vinoteca. Allí podrás disfrutar de alguno de sus vinos ecológicos entre sus antiguas tinajas de 1860, en las que todavía pueden leerse las anotaciones del bodeguero.
Para concertar una visita en Bodegas Cano, puedes hacerlo en el teléfono 626 970 486. La Vinoteca abre los sábados de 12:30 a 15:00 y de 19:30 a 23:00 y los domingos de 12:30 a 15:30 y de 19:30 a 24:00. También abre algunos festivos en horario de mañana.
La naturaleza en la Ruta del Vino de Almansa
El turismo de naturaleza en Albacete es sorprendente, pudiendo explorar maravillosas áreas protegidas en la Sierra del Segura, la Sierra de Alcaraz y el Campo de Montiel. Por su parte, el paisaje árido y ondulado de la DO Almansa y la mano del hombre han dado lugar a recursos naturales muy particulares.
Laguna del Salobralejo
Este pequeño lago salado forma parte de un complejo lagunar protegido como Reserva Natural. A pesar de su tamaño, acoge gran cantidad de especies de aves, tanto de ambientes acuáticos como terrestres, que las utilizan como zonas de cría y descanso. Además, es la laguna que recibe más visitantes de toda España… ¡porque lo atraviesa el tren de alta velocidad 😜!
Pantano de Almansa
Situado a pocos kilómetros del casco urbano, es la presa más antigua de Europa todavía en funcionamiento. Las obras se iniciaron en el s. XVI, y se amplió en el s. XVIII. Este lago artificial de agua de lluvia es vital para contener las avenidas de agua de la rambla de La Canaleja y en el se pueden desarrollar todo tipo de actividades acuáticas. Por supuesto, también puedes disfrutar de los senderos que lo rodean, e incluso atravesar andando el pantano por una pasarela flotante 😯.
Las localidades de la Ruta del Vino de Almansa
Es imposible recorrer las localidades que conforman la Ruta del Vino de Almansa en un fin de semana. Es mas, los fans del «slow travel» te dirán que debes emplear al menos una semana. Nosotros en un fin de semana muy intenso no pudimos visitar Hoya Gonzalo, con su arquitectura rural en piedra seca y la necrópolis íbera de Los Villares. ¡Ya tenemos excusa para volver 😜!
Almansa, el corazón de la ruta
Sin duda puedes dedicar todo un fin de semana a descubrir esta localidad, dominada por el castillo medieval que corona el Cerro del Águila.
El Castillo de Almansa, guardián de la ciudad
Esta fortaleza fue construida en las primeras décadas de dominio cristiano para defender y controlar la región. La estructura actual es del s. XVI, aunque parte fue reconstruida después del s. XVIII, presumiblemente al sufrir daños tras el Terremoto de Lisboa.
El acceso se realiza subiendo la amplia escalinata que arranca al lado de la Oficina de Turismo. Al entrar atravesarás la barbacana curva y luego llegarás al Patio de Armas y a la Torre del Homenaje. Allí se encuentra el centro de interpretación de la fortaleza. Además de mucha información, incluye una maqueta de la fortaleza original, varias armas y armaduras, el aljibe y la excepcional escalera de caracol gótica que da acceso a la terraza superior.
El castillo abre de martes a sábado en horario de 11:00 a 14:00 y de 16:00 a 18:00.
Patrimonio de Almansa
Pero Almansa es más que su castillo medieval. Por ejemplo, el Ayuntamiento de Almansa ocupa un antiguo palacio renacentista del s. XVI. Se conoce con el sobrenombre de la Casa Grande porque ese palacio antiguamente pertenecía a un Grande de España. Además de su bella portada manierista del s. XVIII en el interior se le ha añadido una segunda portada que en su día perteneció al palacio de los Condes de Antillón.
Además, paseando por Almansa también podrás descubrir dos bellas casas solariegas o el Antiguo Convento de las Agustinas. Mención aparte merece la imponente iglesia arciprestal de la Asunción cuya cabecera tiene un aire muy francés que recuerda a la Capilla Real del Palacio de Versalles.
Pero además, Almansa también es conocida por sus fiestas de moros y cristianos, declaradas de Interés Turístico Internacional. Menos conocida es la Batalla de Almansa, no por que no nos suene el conflicto, sino porque apenas se profundiza en la verdadera dimensión histórica que tuvo.
El Museo de la Batalla de Almansa
Dicen en Valencia aquello de «Cuando el mal viene de Almansa, a todos alcanza», en referencia a la pérdida de los Fueros cómo consecuencia de esta batalla. Pero, ¿sabías que ni los Fueros se perdieron en esta batalla ni hubo valencianos luchando en ella? 😯. En Almansa en 1707, las tropas borbónicas de Felipe V se enfrentaron a un conglomerado de fuerzas británicas, portuguesas y neerlandesas, en una batalla que cambió el rumbo de la Guerra de Sucesión Española.
Todo esto y mucho más podrás descubrir en el Museo de la Batalla de Almansa. Entre sus joyas destaca una réplica del monumental óleo de Buonaventura Ligli y Filippo Pallotta, cuyo original se encuentra en el Museo del Prado. Además, encontrarás estandartes, armas y maquetas que te transportarán a este episodio histórico clave.
El museo abre de martes a sábado de 10 a 14 y de 16 a 19 y los domingos en horario de mañana.
Alpera, la joya oculta de la Ruta del Vino
Es sorprendente cómo una localidad tan pequeña como Alpera alberga un patrimonio tan rico y variado. En el corazón de esta villa destaca la Iglesia barroca de Santa Marina, que guarda en su interior un preciado Lignum Crucis. Si te interesa la cultura tradicional, no puedes perderte el Nevero de Alpera, una construcción del s. XVIII que es de los mayores y mejor conservados de la Península Ibérica. Esta estructura, utilizada para almacenar hielo, abastecía a los comerciantes de productos frescos de todo el Levante.
Pero el verdadero tesoro de Alpera es la Cueva de la Vieja, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Este santuario rupestre fue un lugar sagrado utilizado de forma ininterrumpida durante milenios. Por ello, en sus paredes conviven figuras esquemáticas junto a detalladas representaciones figurativas, una muestra de la evolución artística y espiritual de nuestros antepasados. Sin duda, tu mirada se detendrá en el impresionante Gran Chamán, una figura central de este abrigo: un danzarín desnudo, coronado con un penacho de plumas, rodeado por toros y ciervos que parecen cobrar vida a su alrededor 😯.
La Higueruela, vientos de tradición
En La Higueruela, tradición e innovación se dan la mano. Este municipio albaceteño destaca por ser un referente en energía renovable, como podrás descubrir en la Casa de los Molinos, un interesante centro de interpretación dedicado a los parques eólicos que dominan su paisaje.
Pero no todo es viento en esta localidad. Aquí también se encuentra un pedazo de historia milenaria: la Alquería Andalusí de La Graja, donde se descubrió la primera mezquita rural de Castilla-La Mancha. Este antiguo caserío ganadero, con más de 1.000 años de antigüedad, conserva los restos de una pequeña mezquita, viviendas con sus dependencias, grandes corrales e incluso las calles principales de su época.
Dónde dormir en la Ruta del Vino de Almansa
Como hemos comentado, el centro neurálgico de la Ruta del Vino es Almansa, dónde encontraras una oferta de alojamiento variada y acorde a todos los bolsillos. Por supuesto, en el resto de localidades también hay alojamientos, aunque mas tipo hostal o casa rural. Puedes encontrar tu alojamiento ideal el mejor precio en el siguiente enlace.
Dónde comer en la Ruta del Vino de Almansa
La región se caracteriza por el sabor y la contundencia de la cocina castellana, con alguna influencia levantina. Además, la repostería tiene gran importancia en la zona y por supuesto no podemos olvidar sus vinos DO Almansa, en los que la garnacha tintorera brilla con luz propia.
Restaurante +Ideas, trampantojos tradicionales en Higueruela
Cocina tradicional reinventada en unos particulares trampantojos donde nada es lo que parece. Entre sus platos, la suela de lomo de orza o naranjas de la China que no son naranjas ni de la China 😂. Tampoco te puedes perder su Máscara de Zerdo, acompañada de un fino cordón de salsa black parrilla en forma de Z 😯.
Pero si sus platos principales te sorprenden no te puedes perder los postres, entre los que destaca el tradicional café, copa y puro, que en realidad es un divertido dulce. Todo este derroche creativo es fruto de la imaginación del chef Antonio González, Premio Raíz Culinaria 2024 al Talento Joven. Sin duda, toda una experiencia.
Restaurante los Arcos, tradición en Alpera
Este establecimiento no solo destaca por su deliciosa cocina, sino también por el toque especial de sus anfitriones… ¡y sus canciones! 🎶 Pero para descubrir esa faceta, tendrás que visitarlo 😉. En cuanto a la gastronomía, el restaurante brilla con sus carnes a la brasa, preparadas con producto de proximidad y un toque maestro que las convierte en una experiencia inolvidable. La atención cercana y el ambiente acogedor harán que te sientas como en casa.
Eso sí, los platos son generosos, así que modera los entrantes para no quedarte sin espacio para el plato principal. Entre los favoritos para empezar, no puedes perderte el jamón, cortado a mano con maestría, o el revuelto de la casa, una combinación irresistible de habitas, espárragos, ajos, virutas de jamón ibérico y trufa rallada 😋. Como plato principal, la paletilla de cordero o la parrillada son apuestas seguras que harán las delicias de los amantes de la buena mesa.
Mesón de Pincelín, toda una institución en Almansa
Conocido por ir siempre «hecho un pincelín», Pascual Blanco Cantos dejó atrás la peluquería para fundar junto a su mujer, Josefa, el emblemático mesón «El Pincelín». Este pequeño bar, transformado con esfuerzo y dedicación, se ha convertido en todo un referente gastronómico en Almansa, donde la cocina tradicional brilla con personalidad propia.
En cuanto a los platos, puedes dejarte sorprender con su exquisita ensalada de perdiz en escabeche, que combina frescura y tradición, o probar un clásico manchego: lomo de orza acompañado de ajo-aceite, pisto y patatas a lo pobre. Si eres amante de las croquetas, no te puedes perder sus croquetas cremosas de jamón ibérico. ¿Y de plato principal? Prueba su bacalao desalado cocinado a baja temperatura con tomate confitado, una auténtica joya culinaria que hará las delicias de tu paladar.
Ahora, ya te puedes lanzar a recorrer la Ruta del Vino de Almansa. Descubre un territorio que marida cultura, tradición y patrimonio con naturaleza y vino, un secreto celosamente guardado esperando ser descubierto. ¡Hasta pronto!
Agradecemos a la Ruta del Vino de Almansa la posibilidad de descubrir, sentir y vivir una parte de sus numerosos atractivos.
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