Castro celta de El Raso, la joya vetona de Ávila

En el municipio abulense de Candeleda, en el paraje de El Freillo, se encuentra el yacimiento de la Edad del Hierro más completo de toda Ávila. El Castro celta de El Raso ocupaba unas 20 hectáreas y contaba con 300 viviendas y unos 1.500 habitantes. ¿Te vienes con nosotros a conocer este importante yacimiento vetón?

Cuando pensamos en los antiguos pobladores de la Península Ibérica prerromana siempre nos viene a la cabeza Numancia. Sin duda, esta ciudad estado celtíbera ha pasado a la historia por derecho propio. Pero en la Península había muchas otras tribus prerromanas. Los vetones habitaban las regiones entre los ríos Duero y Tajo, ocupando el territorio de las actuales provincias de Ávila, Cáceres y Salamanca. Sus dominios alcanzaban también parte de Toledo, Zamora y Portugal, y a día de hoy se pueden ver varios de sus castros defensivos cómo Ulaca, el Castro de la Mesa de Miranda y el Castro de El Raso.

Pinceladas de historia del Castro de El Raso

Hace más de dos mil años, miembros de la tribu céltica de los vetones se establecieron en un bello paraje montañoso de helechos y robles dominado por el pico Almanzor, dominando la garganta del río Alardos.
Desconocemos su nombre original, siendo conocido hoy día como castro de El Raso por estar en las proximidades de esta pedanía de Candeleda. El poblado amurallado que ahora vemos no se encuentra en su ubicación original. Según se cree, el castro primitivo fue destruido por los ejércitos de Aníbal.

El final de las Guerras Numantinas propició la romanización del poblado, como atestigua la aparición de monedas y de escritura con grafía latina. Años más tarde, los vetones apoyaron a Pompeyo durante la guerra civil romana. Cuando Julio Cesar obtuvo la victoria, las durísimas condiciones que impuso a los perdedores provocaron el abandono del castro y que este cayese en el olvido.

A pesar de que se le llama castro, esta construcción y sus fortificaciones formaron una auténtica ciudad. En sus más de 20 hectáreas se podían alojar más de 2.000 habitantes. Posiblemente en su apogeo su población puso estar al nivel de la propia Numancia.

Visita guiada al castro de El Raso

La visita es libre y gratuita. Sin embargo, sólo puedes acceder al interior de las casas reconstruidas con la visita guiada. Se puede reservar en el Ayuntamiento de Candeleda enviando un Whatsapp al teléfono 679 538 014. Las visitas sólo se realizan de marzo a mediados de septiembre normalmente en fin de semana. El precio es de 3 € por persona.

Cómo llegar al castro de El Raso

Una vez llegues a la pedanía de El Raso, dirígete al restaurante El Mirador de Gredos. Justo al lado sale sale la pista de ascenso. A unos 3 kilómetros te encontrarás el parking donde dejar tu vehículo para continuar a pie hacia el yacimiento del castro de El Raso. También encontrarás una caseta de información.

Si tienes tiempo y hace buen día, es preferible hacer todo el recorrido andando, ya que la dificultad es baja.

Visita por libre al castro celta de El Raso

El castro está muy bien acondicionado para su visita, y parte de el es accesible con silla de ruedas . Además, encontrarás muchos carteles y señales informativas. Además, la visita libre es gratis 😜.

Actualmente sólo se ha excavado el 5% de la superficie total del castro. Aun así, podrás ver varios elementos interesantes.

La muralla

Sólo puedes observar unos 400 m. de sus casi 2 Km de perímetro. Presenta torres defensivas cuadradas y puertas en pasillo para facilitar la protección del castro. En algunos puntos, como en la zona de la puerta noroeste, también podremos ver los restos de un foso.

Nucleo A de viviendas

Está situado en la ladera Este del castro celta de el Raso, junto a la puerta principal de acceso al recinto. Llama la atención su perfecta adaptación a la pendiente del terreno por medio de habitaciones escalonadas. En ellas podemos observar incluso restos de las cocinas.

Núcleo B de viviendas

Conforma el grupo más amplio de viviendas excavadas. Destacan varias construcciones circulares sin puerta. Supuestamente eran depósitos de alimentos con acceso por la parte superior. En el vestíbulo de una de las casas de este núcleo se encontraron algunos objetos de plata. Por el cuño de las monedas acuñadas, sus habitantes los escondieron después de la derrota de Pompeyo. También encontrarás la reconstrucción de dos de las casas halladas en las excavaciones.

Núcleo C de viviendas

En las casas de esta zona verás los restos de unos pilares de granito. Gracias a ellos sabemos que estas viviendas tenían un porche con banco corrido. En el dibujo de abajo puedes apreciar mejor cómo eran.

Los miradores

Para poder apreciar mejor el conjunto del Castro celta de El Raso hay dos miradores. El mirador sur está cercano a la muralla. En el puedes ver perfectamente las defensas naturales que hicieron que el castro se instalase en esta ubicación. El mirador norte esta siguiendo el camino que lleva al castro. Desde el tienes unas vistas insuperables de todo el conjunto de las excavaciones.

El Castillo

Las defensas del Castro celta de El Raso eran formidables gracias a su privilegiada situación, la muralla y el foso. Sin embargo era muy vulnerable en su zona este. Por ese motivo, en el punto más alto se construye un pequeño recinto fortificado al que todavía hoy se le llama «El Castillo«.

El Castillejo

No contentos con la defensa proporcionada por el Castillo y el foso, los habitantes de este castro vetón decidieron mejorar todavía más las fortificaciones. Para ello, más arriba todavía se construyó una pequeña torre cuadrangular de la que ahora sólo se conserva la planta. Esta torre podía contener una guarnición y no estaba exenta, sino que estaba unida al complejo principal para facilitar el repliegue. Para poder ver el castillejo debes seguir el derrumbe de la muralla por el este.

Otras cosas que ver en los alrededores del castro Celta de El Raso

Para complementar la visita tienes la opción de seguir subiendo a través del núcleo de viviendas C. Tras una caminata de 1,5 Km. llegarás a la Majada de Braguillas. Esta visita permite conocer como era la vida de los pastores a mediados del s. XX.

Para completar la jornada a 380 m. al sureste se encuentra Peña Escrita/Las Zorreras. Desde hace 5.000 años allí se encuentran unas pinturas rupestres. Actualmente están protegidas por rejas y se ha instalado una plataforma metálica que permite contemplarlas. Las pinturas corresponden al llamado Arte Esquemático, con figuras de trazado rápido y elemental.

La visita a todos estos elementos es una ruta circular con dificultad media. Te dejamos un mapa de la ruta por si quieres realizarla. Con todo lo que hay que ver en Candeleda nosotros no tuvimos tiempo de hacerla. Ya tenemos excusa para volver 😜.

Complementos a la visita del castro celta de El Raso

Para completar la información sobre el yacimiento es muy recomendable visitar el Muséo Etnográfico Municipal. Está situado en Candeleda, en la Calle Corredera, 10. El horario es de martes a sábado de 10 a 14 y de 17 a 19:30. Los domingos abre de 10 a 14. En temporada alta, de junio a septiembre, el museo abre sus puertas y cierra media hora más tarde. Además, la visita es gratuita.

En el museo puedes ver diversos objetos cotidianos encontrados durante las excavaciones del castro amurallado. Hay aras votivas, collares, herramientas, monedas y otros enseres de la vida diaria.

Con esto dejamos este vistazo al pasado y a los restos del castro de El Raso, uno de los más completos que se han encontrado. ¡¡Hasta pronto!! y recuerda «Candeleda tiene de todo»

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